Llegó la Luz de la Paz de Belén desde Bilbao
La Luz de la Paz de Belén llega a Cantabria con el objetivo de llevar a los hogares cántabros el compromiso de todos en la construcción de un mundo en paz. El lema de este año “Pásala” quiere expresar esta voluntad de participar activamente en la difusión de la Luz de la Paz, un acto simbólico de solidaridad hacia personas como los emigrantes, tolerancia, amor y esperanza en un mundo más justo.
La Luz llegó el pasado 16 de diciembre a Barcelona procedente de Viena traída por un grupo de jóvenes de Euskalerriko Eskautak y desde allí los Scouts de Castilla y León acudieron a recoger la Luz de la Paz de Belén para llevarla a sus localidades. Como si de una llama olímpica se tratara, una representación de los Scouts Cántabros, formada por integrantes de los Grupos Scouts Escobedo y Cachón de Maliaño, acudió ayer jueves a la ciudad de Bilbao a recoger la Luz de la Paz de Belén.
A partir del día 21 de diciembre se van a suceder una serie de actos para difundir la Luz de la Paz de Belén por Cantabria. Hoy viernes 21 se celebrará el primer acto de acogida y reparto de la Luz en la parroquia San Juan Bautista de Maliaño, organizado por el Grupo Scout Cachón de Maliaño. Posteriormente a lo largo de todo el fin de semana se distribuirá en diferentes parroquias de Santander, Camargo, Torrelavega, Reocín, entre otras localidades gracias a los diferentes grupos scouts. Esta actividad también está abierta a la participación de otros colectivos juveniles, parroquias y vecinos.
La Luz de la Paz es una buena oportunidad para educar en la paz a los niños y jóvenes, paso imprescindible para construir la paz en el mundo. Otro objetivo es extender el trabajo activo a favor de la diversidad cultural, política y religiosa. Además, con la Luz de la Paz de Belén, se quiere acercar el sentido de la Navidad a los grupos, a las familias, a los pueblos, a las personas y a los barrios menos favorecidos.
Este acto es una iniciativa de Scouts y Guías de Austria que, con la colaboración de grupos Scouts de diferentes países de Europa y otros continentes, reparten la Luz de la Paz que ha encendido un niño/a austriaco/a en la cueva del Nacimiento de Jesús en Belén. La distribución de la Luz de la Paz a todos los países participantes se realiza desde Viena. Allí, unos días antes de Navidad, se reparte la Luz a todos los asistentes para que la hagan llegar a sus respectivos países. Posteriormente, los Scouts y Guías la distribuyen por hospitales, asilos, prisiones y otras asociaciones de la capital austriaca. Proceso que se repite en cada una de las ciudades a las que llega la Luz.
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